Durante la misa solemne y Tedeum el cardenal Juan Luis Cipriani hizo un llamado a las autoridades civiles para evitar caer en el materialismo exacerbado y dar mayor énfasis a la familia y los valores.
"Esa visión es producto del materialismo pragmático, que deshumaniza y maltrata la condición y dignidad de las relaciones humanas especialmente de las grandes mayorías", afirmó.
A la vez, lamentó que ciertos grupos minoritarios fomenten el aborto en los países latinoamericanos y abogó por el valor de la vida humana y la primacía de la familia.
"Invito, pues, a los gobernantes, legisladores y magistrados a reflexionar sobre el bien evidente que los hogares en paz y en armonía aseguran a la vida humana, al matrimonio y a la familia, aspectos neurálgicos de la sociedad peruana. No olvidemos que el objeto de las leyes es el bien integral del hombre, la respuesta a sus necesidades y aspiraciones", afirmó.
La pobreza y la desigualdad social también fueron tratados en un primer momento por el cardenal Cipriano, quien advirtió sobre el gran desafío que esta problemática representa, pero consideró más urgente atender la educación.
"Es más urgente seguir impulsando con firmeza una reforma educativa con la participación de los padres de familia, que contemple y priorice la formación de personas en los valores cristianos", indicó.
Por último, hizo un llamado a los medios de comunicación para que asuman un papel social y solidario que brinde aportes a la nación.
"Urge una respuesta positiva a la invitación que continuamente hace la Iglesia a los medios de comunicación escritos, radiales y audiovisuales, para que asuman a cabalidad el rol que les corresponde en la educación de la niñez y de la juventud y en la formación de un coherente tejido moral que sea sustento espiritual del desarrollo material que contemplamos", precisó.
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